Hola de nuevo . Venga me pongo al día que se que estoy un poco vaguete y esperáis mis fotitos de la vida submarina.
En mi última entrada os conté que habíamos contratado el alojamiento en la isla de Mabul, que es la que más alojamientos tiene de las islas del archipiélago. Habíamos escuchado maravillas de la isla y de sus playas pero la verdad que cuando nos dejó la lancha rápida en el hotel de la isla y dimos una vuelta nos llevamos un chasco. Las playas estaban muy sucias y no era para nada un lugar tan paradisíaco como nos habían contando. La única playa sin basura, tenía un cartel de que no se podía andar por la orilla por peligro a pisar un pez araña o una raya. Así que toda nuestra esperanza de disfrutar en la isla estaba en el snokel o buceo con tubo. Para hacer snorkel el hotel te ofrecía tres barcos al día que te llevaban a diferentes puntos de arrecifes en la misma isla de Mabul o en la isla más cercana, Kapalai. El primer día ya solo podríamos hacer la salida de las 1330 h.. Dejamos las cosas en la habitación, alquilamos el equipo de snorkel y al agua.
Y en el primer buceo, las primeras tortugas. Increíble poder bucear con estos animales. Es toda una experiencia. Además de las tortugas, corales de todos los colores y formas, y un verdadero acuario de peces, increíble el contraste con la orilla llena de basura.
Ese día nos quedamos con ganas así que cogimos las gafas y las aletas a buscar un sitio desde el que poder tirarnos al agua. Es una verdadera pena como están las orillas de basura. Imaginaros que es imposible entrar por la orilla para nadar de la cantidad de basura que se acumula. Así que cogimos uno de los embarcaderos que te adentra en el mar unos 150 metros y desde ahí nos zambullimos.
Tras esa última sesión de snorkel nos fuimos a ducharnos y a cenar. Después buscamos una tienda en el poblado para comprar unas latitas de nuestra bebida favorita, el zumo de cebada, y a la camita.
El día siguiente sí que aprovechamos las tres salidas del barco, siendo la visita a la isla de Kapalai donde más vida submarina vimos.
Para la cena me esperaban un par de pescados comprados directamente a los pescadores en las barcas , hay que cuidarse en vacaciones .
Por la noche hicimos un grupito con más mochileros de diferentes países, Alemania, Holanda, Francia, República Checa, Eslovaquia, vaya podíamos haber jugado a Eurovisión, pero nadie estaba dispuesto a cantar Karaoke.
Al día siguiente dejaríamos la isla y pasaríamos la noche en Semporna. Se nos unieron al grupo un par de amigos , Tomas y Silvia , que viajarán con nosotros unos días.
Desde el hostel donde nos hospedamos contratamos para ese día una visita a un parque natural en Semporna y un tour por un par de islas para el día siguiente.
La visita de ese día era una subida a unas vistas panorámicas a las afueras de Semporna. El día estaba bastante cubierto así que no teníamos demasiada visibilidad. Pero nos divertimos haciendo fotos panorámicas.
Tras la cena y unas partidas de billar en un bar de Semporna nos fuimos a dormir ya que al día siguiente de nuevo madrugar, el tour por las islas empezaba a las 0815 de la manana.
Antes de salir dejamos las mochilas preparadas para cambiar de ciudad a la vuelta de las islas.
La primera parada de la lancha rápida tras una hora aproximada de navegación fue en la isla Buhaydulong, al norte del archipiélago, donde haríamos una caminata de una hora para subir al punto más alto de la isla. De nuevo el día estaba bastante cubierto aunque las vistas igualmente eran hermosas.
Tras volver de la caminata la lancha nos llevó a la isla Pom Pom. Está si que era una isla paradisiáca, arenas blancas, palmeras, agua cristalina. Pero fuera de las posibilidades de nuestros bolsillos mochileros ya que existían solo dos alojamientos, con precios a partir de 150 euros la habitación doble.
Tumbarnos en la arena, banarnos, snorkel, paseo, esa fue nuestro día de relax en la isla. Hasta las 16 h que nos llevaron de vuelta a Semporna.
Sobre las 18h nos recogían la furgoneta para trasladarnos a la siguiente ciudad, Tawau. Allí pasaríamos dos noches, ya que queríamos visitar el Parque de las Colinas de Tawau al día siguiente.
No teníamos muchas expectativas del parque pero nos sorprendió gratamente. Te adentras en una verdadera selva de árboles altísimos. De hecho visitamos lo que es considerado el arbol tropical más alto del mundo con 88,32 metros de altura. Es el noveno árbol más alto del mundo, el primero es una Sequoia de California con 112,87 metros de altura.
Hicimos dos caminatas más de unos 3 km cada una que nos llevaban a una bonita cascada, donde nos refrescamos y a unas aguas termales con olor a huevo podrido.
Y además estuvimos siempre acompanados por nuestras queridas sanguijuelas. Estaban pegadas a las hojas y te las encontrabas chupando sangre debajo de tus calcetines. Todos nos tuvimos que quitar alguna. De hecho yo me llevé una pegada a la parte posterior del muslo sin saberlo. La tía se tuvo que hinchar de chupar sangre porque no me di cuenta hasta que después de ducharme, Tomas me dijo que tenía el pantalon lleno de sangre, y solo encontramos la herida que no dejaba de sangrar, pero a mi amiga la sanguijuela no la vimos. Supongo que se me caería en el taxi que nos llevó al hotel al sentarme. Así que me tuve que poner a lavar los dos pantalones pero se quedaron perfectos tras un buen frote.
El próximo día volabamos de vuelta a Kota Kinabalu y nos despedimos de Silvia y Tomas. Todo un placer viajar con estos chicos super divertidos. Seguro que os visitamos pronto en Praga, unos de mis destinos pendientes de Europa.
En Kota Kinabalu, pasaremos las tres últimas noches de nuestro viaje en Borneo. Desde aquí manana yo viajo a Manila y los holandeses de vuelta a casa.
Ayer visitamos un par de islas cercanas a Kota Kinabalu , Sapi y Mamutik, con unas agradables playitas y algo de buceo pero nada comparado ya al snorkel de Mabul.
En fin que se termina esta etapa, justo hace hoy 3 semanas que viajo, y me quedan otras tres. He disfrutado mucho de la naturaleza de Borneo y de su gente. Y también ha sido un placer viajar de nuevo con mis amigos Rob, Bas y Max. It's a pleasure travelling with you again guys!!! See you soon somewhere in the world!!
Y a vosotros lectores, agradeceros como siempre vuestros comentarios a pesar de que cuestan un poco porque nos es muy amigable la opción de comentar en blogger. Se agradece que me sigáis, así que os seguiré contando lo que me pasa por Filipinas.
Abrazos